Continúan las críticas al Decreto 4794. Políticos y autoridades de oposición consideran que la norma que raciona el uso del gas natural para la generación de electricidad en las fábricas, asesta un duro golpe a la industria nacional y además muestra la ineficiencia del gobierno nacional en un contexto de declive de la producción gasífera.
“Lo que la norma pretende es sacar más plata a los de afuera con energía barata, es decir, con la venta de gas natural a la Argentina y Brasil y sacarnos plata a los de adentro, a la industria nacional, con la energía más cara, es decir, con el consumo de energía eléctrica”, criticó el senador Rodrigo Paz (Comunidad Ciudadana).
El legislador considera que la norma va en contra de la política impulsada por el gobierno de Luis Arce de sustitución de importaciones. Explica que el gas abarata los costos de producción y permite ser competitivos con las importaciones.
La Cámara de Industria y Comercio (Cainco) de Santa Cruz señaló que el costo de la electricidad subirá un 60% para las industrias, lo que redundará en los precios de los productos para el consumidor final.
El gobernador Luis Fernando Camacho criticó la ineficiencia gubernamental para aumentar la producción de hidrocarburos. Cuestiona la falta de inversiones en proyectos exploratorios y que se prioricen las empresas públicas deficitarias y usadas como botín político de pegas.
“El gobierno no quiere empresas prósperas, empresas que verdaderamente producen”, lamentó el diputado Erwin Bazán (Creemos), quien cuestionó el cinismo del presidente Luis Arce de acudir a la Expocruz sabiendo que tenía bajo el brazo un decreto que perjudica a las empresas.
El 7 de septiembre pasado, el gabinete aprobó el Decreto Supremo 4694 que establece que en un plazo de un año, las empresas del rubro industrial ya no podrán utilizar gas natural para su autogeneración de electricidad y deberán unirse al Sistema Interconectado Nacional (SIN). Los saldos que dejarán de consumir los industriales se destinarán a mercados que paguen mejor precio por el energético.
“La norma no le quita nada a nadie, claramente establece que las industrias que utilizan gas natural para producir electricidad deben migrar hacia la energía eléctrica y conectarse al SIN, como hacen todos los bolivianos”, retrucó Édgar Caero, viceministro de Electricidad y Energías Alternativas.
Añadió que los volúmenes de gas natural que utilizan las industrias para la autogeneración eléctrica son mínimos, por lo que no debería incidir en un aumento en su producto final.