Un video recorre las redes sociales mostrando a una murga uruguaya haciendo un cover del popular carnavalito argentino 'Humahuaqueño', pero en lugar de la letra tradicional crearon picarescas frases con críticas dirigidas específicamente a los gobiernos de 'derecha' del conitnente, y ni Jeanine Áñez se salva de ser aludida, aunque no fue mencionada. Este número es una melodía dulce a los oídos de los 'progresistas' o izquierdistas latinoamericanos, que encuentran en sus letras una forma de expresarse en contra de los actuales gobernantes que han reemplazado a varios de los del llamado Socialismo del Siglo XXI.
Y es que Carnaval y política ha sido desde siempre una mezcla ineludible.
Piedra libre en Brasil. En Brasil, las polémicas de Jair Bolsonaro con los derechos de las mujeres, LGBT o el medio ambiente, también han sido caldo de cultivo para las alegorías del Carnaval 2020. De hecho, la popular escuela de samba Tom Maior, dedicó su actuación a Marielle Franco, la concejala de Río de Janeiro negra y lesbiana cuyo asesinato en 2018 desató numerosas protestas por todo el país.
Las últimas investigaciones vinculan a los asesinos de Franco, expolicías, con gente relacionada a la familia Bolsonaro.
Pero en ese mismo Brasil, antes de que lo presidiera Jair Bolsonaro, Lula da Silva y Dilma Russef eran centro de escarnio debido a sus respectivos procesos por corrupción que determinaron la prisión para uno y la destitución para la otra.
En 1985, tras 21 años de dictadura militar, Brasil volvió a tener elecciones presidenciales. Ese año, la fiesta grande se denominó Carnaval de la Democracia, marcando el carácter político de la celebración.
Este año no es la excepción.
Rebelión paulista. Sao Paulo siempre fue considerado como el pariente aburrido de Río de Janeiro durante el carnaval. Esta era la ciudad que la gente solía abandonar para salir y divertirse. Pero este año, la urbe más grande de Brasil es la sede de la mayor cantidad de fiestas callejeras o "blocos": habrá 870 en total, comenzando este fin de semana y continuando después. En Río, en cambio, habrá 384.
El crecimiento del carnaval de Sao Paulo se produjo con el apoyo de las autoridades de la ciudad, quienes han introducido regulaciones en los últimos años para alentar las fiestas callejeras. Además, han proporcionado la infraestructura para permitir su realización.
"Hubo un tiempo en que se solía decir que la calle era un lugar solo para automóviles y dijimos, 'no, no lo es, la calle es un lugar para la gente'", dice Ale Natacci, presidente de la Asociación Cultural Académica de Baixo Augusta, el "bloco" más grande de Sao Paulo.
Cada año, este bloco -conocido por ser activista-, lleva adelante una consigna. La de este año es: "Viva la resistencia". "Este año, elegir la consigna fue fácil, fue un regalo", dice Ale Natacci, refiriéndose a las acusaciones de censura por parte del gobierno de Jair Bolsonaro. "La cultura está siendo marginada y pensamos que era importante decir que no, la cultura es muy importante, crea empleos. El carnaval es cultura, es democracia, por lo que venimos a hablar a favor de la democracia, la libertad de expresión y la cultura".
Carolina Lazameth ejerce como profesora en la zona de Macapa, en el Amazonas. Para el festival decidió usar una especie de cintillo con la frase: "¿Por quién votaste?". "El gobierno que hoy está en el poder ha realizado serios ataques contra la cultura. Para mí, el carnaval es tanto una protesta como un acto político", dice. "Veo mi cuerpo como un acto político. Así que creo que es importante que cualquiera que se acerque a mí sepa por quién voté, así no hay sorpresas".
Expresiones
Noreste: En Recife, donde se celebra uno de los carnavales más famosos del país, el músico Antonio Nobrega dedicó una actuación de apertura a los artistas y periodistas de Brasil. Ambos grupos han provocado repetidamente la ira de los líderes políticos de Brasil, quienes a menudo señalan a periodistas y periódicos por su actitud crítica.
Río de Janeiro: La famosa escuela de samba Mangueira ya ha agitado los ánimos con su plan de desfilar por el legendario Sambódromo de Río de Janeiro el domingo por la noche con una actuación en la que se espera que se haga eco de la violencia policial en Brasil.
Oficialismo: El Gobierno cuenta con numerosos apoyos en las grandes ciudades, en particular en Río de Janeiro, donde la familia Bolsonaro mantiene una firme base de partidarios.